Fuente imagen | estimulacionparabebes.com |
Para estimular al niño hay que tener conocimientos sobre la materia. Lo primero que debemos saber es que el ambiente es ya de por sí estimulante. Las voces, los ruidos, la luz, los sonidos y la temperatura comienzan a influir sobre nuestro hijo desde antes del nacimiento.
Estos conocimientos que tenemos ahora, y que difieren tanto del concepto antiguo de que los bebes "no se enteran de nada", se deben a las investigaciones de la neurología, la psicología, la educación y la genética, y a las nuevas técnicas con cámaras y ecografías tridimensionales para observar al feto, las tomografías que revelan los grados de actividad y la formación de circuitos en el cerebro del bebé.
Hoy se sabe que todos nacemos con un equipamiento genético, pero esto no es suficiente para que desarrollemos nuestra inteligencia. Hay muchas otras experiencias que podemos proporcionar a nuestro hijo y que ponen en marcha su cerebro.
¿Por qué estimular? Para que el aprendizaje sea óptimo y se realice en el periodo adecuado.
¿Por qué empezar cuanto antes? Porque el bebé tiene momentos idóneos para aprender, estadios críticos que no hay que desaprovechar.
FUENTE | El manual de Supernnany (2007) Extracto
0 comentarios :
Publicar un comentario
¡Gracias por participar! =)