Fuente Imagen | Banco imágenes INTEF |
En otros tiempos había millones de peludos bisontes de color castaño
vagando por las praderas de América del Norte. Pero hacia 1900 casi se habían
extinguido. Ello se debió a que los cazadores mataban más y más bisontes, para
apoderarse de sus pieles, que se vendían a las industrias, las cuales
convertían en objetos de cuero. Los bisontes también se mataban para consumir
su carne.
La gente no testaba enterada de que la matanza proseguía. Pero al fin
se dio cuenta de que el bisonte americano se estaba extinguiendo.
Algunas personas conservaban pequeñas manadas en ranchos particulares.
El gobierno compró algunos de estos animales y los llevó al parque nacional de
Yellowstone, donde estaban protegidos. Pero los cazadores aun lograban matar
más bisontes.
Entonces se aprobó una ley que prohibía matar a estos animales. Se
reservaron tierras para pequeñas manadas de bisontes, que fueron protegidos y
cuidados. En el último momento, el bisonte americano se salvó del exterminio.
Nunca habrá tantos bisontes como antes, pero es bueno saber que algunos de
estos grandes animales siguen vagando por la pradera.
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